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Carmen Gallego

Feminicidios a la carta: una sociedad que no reacciona.

Feminicidios a la carta: una sociedad que no reacciona.

Desde el último post en el que contaba que ya llevábamos cuatro muertas en lo que iba de año, se han sucedido vertiginosamente, otros seis asesinatos. Si alguien no ve en esto una relación inmediata de causa efecto tras escuchar en las noticias estas muertes, que me lo diga. Desde instituciones como el Ayuntamiento de Zaragoza intentamos prevenir, hasta ahora con éxito, y  atajar el problema del terrorismo doméstico, que afecta diariamente a miles de mujeres. "Intentamos atajarlo desde su misma raíz, ayudando al mismo tiempo a que las mujeres afectadas por este tipo de situaciones recuperen su autoestima y puedan rehacer su vida", pero no podemos hacer nada si la mujer no pide protección. Creo que cada vez se producen más efectos miméticos en estos "salvadores" que no aceptan que su mujer, su propiedad, les deje. Por eso vuelvo a hacer un llamamiento a los medios de comunicación para que reflejen las caras de los asesinos. Que recojan el momento en el que la policía les detiene, les ficha, les esposa y pasan a disposición judicial. Quiero ver imágenes de cárceles, de barrotes. Quiero que estas personas se vean reflejados lo que son: asesinos, en lugar de protagonistas despechados de los culebrones de mala muerte. ¿Alguien se acuerda ya de las últimas mujeres muertas? ¿Alguien se acuerda de todo lo que han dejado por vivir, de todos los besos que han dejado de dar a sus hijos, su familia, sus amigos, todas estas mujeres?

El 29 de enero murió otra mujer en Soria. Murió en la calle, sin posibilidad de defenderse al recibir, de su ex marido, un tiro. Iba a ver a su abogado para terminar de redactar los trámites legales que consumaran el divorcio. Tenía 38 años y deja a una niña de 5. Su asesino tenía  49.

El 1 de febrero  otra mujer ha muerto en su casa de Oviedo. Tenía 66 años y su asesino 70. También estaban en trámites de separación. Tenía cuatro hijos.

El 5 de febrero, en Meaño (Pontevedra) murió otra mujer de 49 años, acuchillada como la anterior. Su marido, de 48 años, había sido denunciado por ella por malos tratos. Deja tres hijos.


El 7 de febrero, se volvió a repetir en El Campello (Alicante) otro FEMICIDIO. La mujer tenía 33 años, la misma que su asesino. Había roto su relación sentimental con él, semanas antes. Los dos tenían varias denuncias por malos tratos.

El 14 de febrero, en Alcalá de Guadaira (Sevilla), otra mujer de 33 años es asesinada por su ex marido. Habían roto la relación matrimonial tras interponer ella varias denuncias por malos tratos. Murió en la calle, acuchillada. Deja un hijo de nueve años.

La última, por el momento, ha muerto este 15 de febrero en su casa de A Coruña . Tenía 85 años y murió acuchillada. Su marido, de 75, la ha matado, al parecer, para evitar que sufriera los efectos del alzhéimer y del  párkinson.

Todos estos asesinos han sido detenidos por la policía. Todos estos salvadores compasivos se han creido dueños de las vidas de sus mujeres.  La mayoría de estos asesinos han intentado suicidarse  cerrando, de esta manera, el círculo trágico que ha determinado su vida.

¿Han aparecido sus fotos en los telediarios y periódicos? ¿Conoce la sociedad las caras de estos asesinos? ¿Ha salido la gente a la calle enarbolando banderas, con las manos pintandas de blanco, con caretas de muerte  para denunciar estos asesinatos?

Desde el cuatro de enero de este año 2007, diez españolas ya no están entre nosotr@s porque diez hombres así lo han querido. Y la sociedad se calla estas muertes. Y la sociedad esconde estos crímenes tapándolos con los visillos de la cocina. En los medios de comunicación se sirven feminicidios  a la carta, mientras otro futuro asesino se come la sopa.

 

 

2 comentarios

Carmen -

Por supuesto. Gracias por tu visita

Valentin -

Es un drama que lamentablemente tenemos que padecer día tras día prácticamente. Con tu permiso, traslado tu artículo a mi blog.
Saludos